En los mercados emergentes, especialmente en Colombia, la limitada cultura de seguros, es uno de los factores que afectan el crecimiento del mercado asegurador, es por ello que más de una organización, realiza esfuerzos individuales y significativos para poder compartir conocimientos sobre los seguros, de forma simple, clara, transparente y lúdica, especialmente con sus clientes y se extienden a otras personas como parte de su programa de responsabilidad social.
No solo enseñan, sino que también realizan trabajos de investigación a nivel mundial.
Consideramos que el esfuerzo individual es muy importante, pero sería mucho mejor un trabajo en conjunto con las entidades gremiales, así como, el ente regulador, los cuales, pueden ayudar a trazar el camino, centralizar esfuerzos y comunicar un mismo mensaje con relación al significado de los seguros en el país, su importancia e impartir el conocimiento adecuado para que todos podamos entenderlo de una manera muy sencilla y lúdica.
Este esfuerzo realizado por las aseguradoras, entidades financieras, los gremios, entidades reguladoras y el Estado, requiere de nuestra ayuda, especialmente de los que nos desempeñamos en este sector para convertirnos en gestores de la cultura de seguros, compartiendo conocimiento con las personas que nos rodean, orientándolos hacia un mundo asegurador, no con la intención de asegurar nuestro puesto de trabajo en el futuro, sino en algo mucho más trascendental, el poder ayudar a otros a comprender los riesgos a los cuales están expuestos, enseñarles cómo podrían transferirlos a un precio mínimo en comparación con las posibles pérdidas económicas que puedan sufrir en el tiempo y que en caso de que no ocurra, tener la tranquilidad de estar asegurados y ser solidarios con los demás, este último punto, es la esencia del seguro y del ser humano, el cual, lo podemos apreciar cada vez que ocurre algún evento desfavorable que perjudica a un familiar, amigo o extraño.